Investigación aplicada y competitividad

El Sol de México

3 de abril de 2008

Miguel González Ibarra

Ante los industriales de la Confederación de Cámaras Industriales de la República Mexicana (CONCAMIN) reunidos en su nonagésima asamblea, el secretario de Hacienda, Agustín Carstens, reconoció que uno de los grandes desafíos que enfrenta el país para poder tener un desarrollo sostenido a largo plazo, consiste en incrementar la competitividad. Al respecto, se refirió a la necesidad de promover e incrementar la vinculación de las organizaciones productivas con los centros que generan investigación e innovación en el país, así como aumentar los recursos que se les destinan. En México, los esfuerzos de investigación aplicada destinada a mejorar la competitividad, son la mitad de lo que se hace en España, la cuarta parte de lo de Canadá y la décima parte de Estados Unidos, lo que pone de relieve la necesidad de emprender acciones que promuevan el acercamiento de las empresas, las entidades gubernamentales y las organizaciones sociales con los centros generadores de conocimientos.

La competitividad se logra no solo a través del desarrollo de nuevas tecnologías y de nuevos productos, sino que también resulta fundamental que se revisen, diseñen y se vuelvan más eficientes los procesos. En este último aspecto, además de los procesos productivos y administrativos de las empresas, el gobierno tiene un gran desafío, con el fin de que los servicios que brinda a la sociedad se conviertan en factores que favorezcan la productividad, en lugar de ser un obstáculo para el desarrollo de los negocios. De tal manera, el desafío que plantea el secretario Carstens, involucra también una mayor y más cercana colaboración entre el sector púbico y los centros generadores de investigación capaces de producir innovaciones.

Sin embargo, la mejora e innovación en los procesos gubernamentales es uno de los renglones a los que se ha venido dando menos importancia en los últimos años dentro de las políticas públicas, así como en los programas de las universidades y centros de enseñanza superior en el país. De tal manera, la vinculación entre estas instituciones y las dependencias del sector público es aún exigua, lo que brinda al gobierno del Presidente Calderón la oportunidad de impulsar una fuerte colaboración que beneficie tanto a la gestión pública, como a una mejor formación profesional de los alumnos, a aprovechar el gran potencial de conocimientos acumulados en las universidades y a encontrar un mecanismo objetivo de canalizar mayores recursos a la educación e investigación que se desarrolla en los centros de educación superior.

Por su parte, es necesario que en las universidades, los sistemas de incentivos y el reconocimiento académico a la investigación en ciencias sociales que resuelve problemas específicos del sector productivo y de los servicios públicos, se le confiera la misma jerarquía que se otorga a la investigación teórica que se destina a publicaciones. La investigación aplicada en los centros educativos permite poner al servicio de las actividades productivas de la sociedad el conocimiento y la capacidad de sus académicos para analizar y proponer mejoras a casos concretos que se traducen en una mayor eficiencia en los procesos de trabajo, al mismo tiempo que enriquece la docencia.

Hasta la fecha se han dado algunos acercamientos en materia e investigación para mejorar los procesos públicos en el sistema de evaluación del desempeño de los programas gubernamentales sujetos a reglas de operación. Asimismo, algunas áreas, de distintas dependencias y organismos gubernamentales han emprendido con cierto empeño las recomendaciones de la Secretaría del Función Pública para la innovación gubernamental y han convenido programas de mejoramiento de sus procesos de trabajo con instituciones educativas y de investigación. Adicionalmente, se debe hacer mención al interés que comienza a generarse en algunos de los gobiernos estatales y municipales por apoyar sus programas de competitividad a través de la colaboración con los centros de investigación nacionales o de su localidad.

De tal manera, en escala todavía modesta, se está gestando una sinergia que puede resultar de gran beneficio para todas las partes involucradas, además de permitir que el país pueda contar con un entorno más competitivo para el desarrollo de las actividades empresariales, la generación de empleos y de riqueza.

miggoib@servidor.unam.mx

http://www.oem.com.mx/elsoldemexico/notas/n650261.htm

No hay comentarios: